Estocolmo, Suecia, 1967
Vive y trabaja en Estocolmo, Suecia
Aunque se la conoce más por su obra como fotógrafa, Miriam Bäckström también ha trabajado ampliamente con el teatro, el cine, la performance, el texto y, más recientemente, los textiles. A lo largo de su carrera, Bäckström ha aplicado su práctica artística al análisis de la naturaleza de las imágenes, una investigación en curso que la ha conducido a explorar las relaciones entre ficción y documentación, arquetipo e individuo, público y privado, experiencia y percepción.
La primera etapa de la obra de Bäckström en tanto fotógrafa conceptual incluía descripciones técnicamente precisas de los espacios interiores, como apartamentos, galerías de museo y escaparates de grandes almacenes, en los que la figura humana estaba misteriosamente ausente y donde, sin embargo, se podía percibir sorprendentemente la presencia humana, como si fueran escenarios en búsqueda de sus personajes. En la vertiente teatral de su obra –obras teatrales, películas, vídeos y performances colaborativas– a menudo se difumina la línea entre los constructos narrativos documentales y no documentales, invirtiéndose así los papeles de autor y personaje, público e intérprete, público y privado, hecho y ficción.
La obra más reciente de Bäckström, compuesta por tapices basados en fotografías, ha producido unas imágenes-objetos abstractas y de gran escala que sumergen al espectador en una experiencia que es visual y espacial, perceptiva y metafórica. Aunque basadas en la fotografía digital, estas obras resplandecientes también se deleitan en la naturaleza esencial del tapiz en tanto tejido: allí donde termina la resolución de la imagen fotográfica continúan los hilos de la tela, arrastrando aún más al espectador hacia el interior de la imagen.