San Sebastián, España, 1956
Vive y trabaja en Madrid, España
Cristina Iglesias ha reunido una rica y variada obra escultórica, entornos esculturales e intervenciones inmersivas en el espacio público, que se alimentan equitativamente tanto del vocabulario de la arquitectura como de referencias al mundo natural, que acotan un territorio intermedio entre la escultura y la arquitectura y que exploran hábilmente las conexiones resultantes del espacio físico, ficticio y psicológico.
La obra escultórica de Iglesias combina la textura material con un uso minuciosamente orquestado de la luz y la sombra, a menudo creando espacios dentro de espacios que, a su vez, interaccionan con los escenarios arquitectónicos más amplios. Buena parte de la obra de Iglesias (incluyendo sus objetos y dibujos basados en la fotografía) genera una ambigüedad intencionada entre lo íntimo y lo monumental, la interioridad y la exterioridad, lo fáctico y lo ficticio, lo orgánico y lo artificial, mientras que a menudo incorpora referencias sutilmente encastradas a fuentes literarias y culturales.
Iglesias ha alcanzado un renombre internacional por sus encargos a gran escala, como las puertas ceremoniales del Museo del Prado, la Fuente Profunda en la entrada del Museo Real de Bellas Artes de Amberes, las extensas intervenciones en la ciudad de Toledo y su instalación en la City de Londres, que logran una monumentalidad completamente asumida mientras que, al mismo tiempo, capturan una sensación palpable del cuerpo humano y de la experiencia vital individual. Además, Iglesias ha creado una serie de intervenciones integradas en el paisaje natural, como una escultura submarina en la Baja California y un entorno escultural en la jungla brasileña.